Tras la firma del Acuerdo para la Paz y el Desarrollo de San Mateo Ixtatán, Huehuetenango, ocurrido el pasado 8 de noviembre, representantes de la 23 comunidades de la zona norte de ese municipio pidieron a la Corte de Constitucionalidad (CC) que dicho instrumento sea tomado en cuenta como un proceso de consulta.
El argumento de los comunitarios es que durante el proceso de diálogo y negociación se cumplió con todos los requisitos sobre participación e información que se necesitan para ser tomado como un proceso de consulta.
Dicho acuerdo contó con la participación de Monseñor Álvaro Ramazzini en calidad de Testigo de Honor y también con la presencia de autoridades locales, municipales y nacionales, así como de la empresa que impulsa la construcción de dos proyectos hidroeléctricos y una línea de transmisión en el área en mención.
Según Amilcar Pedro Felipe, uno de los comunitarios que acudió a entregar el memorial, urge que regrese el Estado y que se voltee a ver a San Mateo Ixtatán, al cual describió como uno de los municipios más lejanos a donde no ha llegado el desarrollo.
Comentó: “Ahí no hay luz, no hay desarrollo. Urge que los gobernantes vean esto y que se busque la paz”. También describió que se han reunido con varias autoridades y que esperan ser escuchados.
El Acuerdo para la Paz y el Desarrollo promueve acciones en seguridad y justicia, emprendimientos, fortalecimiento institucional y presencia permanente del Estado. Sus alcances incluyen el aprovechamiento sostenible del medio ambiente y los recursos naturales, así como la promoción de la mujer y la juventud en el área.
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